El metal fundido es la solución ideal para obtener componentes a medida que impulsen el crecimiento y el éxito de distintos sectores industriales. Se presenta como una necesidad insustituible para el desarrollo de piezas en la industria debido a su versatilidad, capacidad de adaptación, amplia variedad de materiales y eficiencia en la producción.
A continuación, te compartimos toda la información general sobre el metal fundido. Los puntos que abarcamos son la definición del metal fundido, los procesos que se siguen para fundir el metal y los tipos de metales utilizados.
Contenido del artículo
¿Qué es el metal fundido?
El metal fundido es un estado en el que un metal se encuentra en su forma líquida debido a la aplicación de calor intenso. Una vez que se tiene el metal fundido, adquiere propiedades únicas que lo hacen adecuado para diversas aplicaciones industriales.
Procesos para fundir el metal
El proceso de fundición implica derretir metal y verterlo en un molde con la forma y tamaño deseado, permitiendo que se enfríe y solidifique en esa forma. Sin embargo, existen varios procesos usados para conseguir el metal fundido, cada uno con sus propias características y aplicaciones. Algunos de los procesos más comunes son los siguientes:
- Fundición gris se caracteriza por la presencia de escamas de grafito en el metal que hacen que se vea de ese color. Tiene ventajas en conductividad térmica y amortiguación a la vibración, además es fácil de mecanizar.
- La fundición blanca se consigue cuando el carbono se enfría rápidamente desde el estado líquido. Tiene una alta resistencia a la compresión y buen rendimiento en resistencia al desgaste.
- Fundición maleable es un tipo especial de hierro producido mediante el tratamiento térmico de la fundición blanca, sometida a rigurosos controles para obtener una microestructura donde gran parte del carbono se combina con cementita. Gracias a su rápido enfriamiento, se evita la formación de grafito en la cementita.
Tipos de metales que se pueden fundir
La capacidad de fundir un metal o una aleación está determinada por su composición, la temperatura a la que se derrite y la tensión superficial del metal líquido, que afecta su facilidad de fluir. Estos aspectos son claves para el metal fundido. Prácticamente, todos los metales pueden fundirse, siempre y cuando se alcance su punto de fusión específico.
Algunos de los metales más comunes que se pueden fundir incluyen:
- El hierro y el acero son los metales más utilizados en la fundición debido a su resistencia y versatilidad, suelen utilizarse en diversas industrias.
- Por otra parte, el aluminio es fundido debido a su baja densidad y buena resistencia a la corrosión.
- También, el cobre es conocido por su alta conductividad eléctrica y térmica.
- Al mismo tiempo, el zinc es comúnmente fundido para crear piezas de recubrimiento anticorrosivo.
- El níquel se funde para fabricar aleaciones resistentes a la corrosión y al calor.
- Cuando hablamos del titanio es un metal ligero y resistente que se emplea en aplicaciones específicas.
- Así que el magnesio tiene bajo peso y alta resistencia.
- El plomo aún se funde en aplicaciones específicas.
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